jueves, febrero 16, 2006

El descubrimiento

Ayer por fin lo conocí. Llevaba toda la vida buscandolo. He recorrido muchos caminos,he conocido muchas personas, pero solo ayer descubrí el amor.

No te abandona, siempre perdona, sin decirlo te ama despacio, tranquilo. Da sin recibir nada a cambio, amor que crea, que construye que regenera. No te exige nada sólo espera que tu no le traiciones, que no dudes, que no pierdas. Te busca con la mirada, te siente con los labios, te encuentra dulce, con las mano, te susurra al oido y te acuna en su pelo.

Si ayer descubrí como se ha de querer a alguién a quien amas, ella me lo ha enseñado. No perderé la oportunidad de demostrarselo.

Por ti, mi amor.

lunes, febrero 13, 2006

Sensaciones de perdida


A veces parece que andas perdido entre la maraña de ideas, sensaciones y colores que surjen en tu percepción del mundo. ¿El amor eterno, el amor ideal puede existir? ¿Podemos vencer la sensación de perdida de lo que hemos amado como algo único?.


Reflexiones sobre la posibilidad de no morir en el intento de preservar un amor que ya no calienta como antes pero duele igual. Un amor que cuando te rehuye te encuentra con mas fuerza, que ha crecido enredado a mis pensamientos, a mis ideas, imposible de discernir cuando comenzo la simbiosis. Un amor que entiende, que comprende, pero que se enfria sin remedio.

Quiero volver a encontrarte y fundirnos en una tierna caricia que dure para siempre.

¿ Me escuchas?

viernes, febrero 10, 2006

Las clases medias

Hoy me ronda algo que no llegaré a comprender. Un fenomeno nacido de una sociedad de nuevos "ricos". Quizá habría que revisar el concepto de riqueza, no lo se.

La sensación de que alguién pueda valorarse y creerse mejor persona que otra por el heho de tener mas dinero, mas formación académica o mas coches. ¿Que demonios nos pasa?. Lo mas curioso es que esto pasa entre personas provenientes del mismo entorno, sin ningún genero de dudas. Ayer hablaba con un amigo que recomendaba no llevar a sus hijos a colegios públicos, ya que allí va gente de todas las clases sociales. Atónito, le comente que a que clase pertenecía el para poder hacer esa afirmacion tajante, habiandose criado conmigo en los arrabales de uno de las ciudades dormitorio madrileñas. ¿Que nos pasa?.

Lo ricos son los de siempre, reconozcamoslo. Y esa característica no le hace mejores personas. El resto estamos en la misma escala de riqueza. El dinero no es lo que construye a las personas y a la hora de demostrar nuestro valor humano somos todos iguales. Mientras sigan cultivando en nosotros la semilla del individualismo, seguiremos destrozando lo que tanto nos ha costado contruir: Igualdad en la educación, sanidad y derechos fundamentales, libertad para vivir acorde con nuestros ideales y fraternidad para ayudarnos a realizar nuestros sueños.

jueves, febrero 09, 2006

Brokeback Mountain

Últimamente vamos mucho al cine. Siempre me ha gustado el ambiente que se vive rodeado de multitud de personas unidas por un mismo objetivo. La pantalla del cine te abstrae del mundo real pero te devuelve transformado en alguién diferente. Ideas nuevas se han creado en tu mente, compartidas después con tus amigos y reposadas durante días hasta que ya forman parte de ese ser que vas creando poco a poco.

Brokeback Mountain es la última película transformadora que he visto. Te permite conocer la naturaleza egoista y reprimida que obliga a las sociedades a controlar la naturalidad y definir canones sociales que obligan a actuar tal y como esperan de ti. Refleja de una forma sorprendente el sufrimiento que nos imponemos al reprimir nuestra naturaleza. ¿No podemos formar una sociedad donde cada cual pueda ser como le pide su corazón y su cabeza?. El único límite sería el respeto mutuo. ¿ Por que dos personas no pueden vivir según dicta su corazón, mientras otras, infelices, pueden jactarse de tener una vida ideal?.

Debemos intentar el cambio social, aceptarnos como somos. Hoy nos llenamos la boca con la palabra libertad,pero ¿donde está el limite de esta palabra?. Deberíamos plantearnos que podemos hacer por nuestra propia iniciativa en nuestras sociedades sin tener que romper interminables barreras.

Hay muchas montañas rotas, y muchas vidas que recuperar. No esperemos que lo hagan otros, empecemos ya.

miércoles, febrero 08, 2006

La información y el nuevo mundo

Hace unos días realice una suscripción a un periódico que por su línea editorial y su forma de actuar es una auténtico pez en el oceano de la información.

En la epoca del periodismo de la desinformación, del conocimiento nimio y la busqueda de patrones cada mas estandarizados, Diagonal (http://www.diagonalperiodico.net) nos ofrece la perspectiva del mundo desde las sociedades que lo conforman.

Un periódico quincenal que engancha de principio a fin, porque habla de personas, porque habla de proyectos. Habla de realidades ocultas por los medios masivos de información y deja translucir el espíritu de epocas pasadas donde el dinero no había sustituido aún al espitiu asociativo y común en el hombre. Ese que intentamos descomponer y borrar a través de la globalización.

Diagonal nos enseña como formar un proyecto sin depender mas que de tu propio esfuerzo y de la cooperación desinteresadas de las personas que lo componen. El sueño de alcanzar una publicación independiente dominada por el afán de la transformación social . Que peródico actual puede jactarse de hacer algo mas que supeditarse a una línea política definida según los intereses de los accionistas que lo promocionan. Diagonal no depende de la Bolsa, ni de los caprichos del partido de turno.

Comienza desde la crónica local, pasando por secciones de indudable valor ecológico, cultural y social, hasta los movimientos mas internacionales. Navega por todas y cada una de las personas que se involucran para que el mundo cmabie. hace mucho tiempo que el sistema democrático actual no vela por los intereses de las personas sino por perpetuar lo que interesa a ciertos grupos de poder.

Iniciativas como esta debemos apoyarlas sin dilación y os inivito a que lo hagáis: http://www.diagonalperiodico.net

Un sueño por el que merece la pena luchar, una utopía que podemos alcanzar.