lunes, febrero 16, 2009

Laico como ZP

ZP abandera el laicismo, es el adalid de la izquierda patría...pero no ante el Nuncio del Papa, no ante los dos millones de votantes que tiemblan cuando piensan que algo puede acabar con su Iglesía. Una Iglesía anacrónica, anclada en el pasado, que sigue aleccionando la moral de sus fieles y de los que no lo son. Un organismo acostumbrado a dictar las normas de la convivencia, del amor, de la paz y de la vida de todos desde su creación.

No quiero abandonar la esperanza de que esto acabe. Aristoteles abrío la lucha contra la superstición con la busqueda de la verdad por uno mismo. Si nos enorgullecemos tanto de nuestra filosofía occidental no podemos seguir en un mundo donde los crucifijos enmarcan las escuelas y las iglesias o religiones dictan los espacios morales. La religíon debe quedar donde le correspode en el espacio individual de cada uno de nosotros. Sin verdades absolutas, sin imposiciones y sin victimismo.

No nos déis lecciones de moral. EL aborto, la libertad sexual o familiar, el derecho a vivir la vida según tu propio criterio son conceptos que os negais a asumir. Zapatero no quiero plantar cara con decisión pero es la sociedad la ya lo está haciendo.

Requiem!

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